La televisión paraguaya cumple 50 años a la vanguardia en tecnología

El 29 de setiembre de 1965 nacía la televisión paraguaya, con la emisión de la primera señal de un canal local, el SNT. A cinco décadas de esa histórica jornada, referentes del mundo audiovisual recuerdan y reflexionan sobre la trascendencia de la pantalla chica en Paraguay.
Por Adrián Cáceres | [email protected]
Uno de ellos es Humberto Rubin, quien en junio de 1969, con sus hermanos Arturo y Armando, amplió las transmisiones televisivas, porque la tevé arrancaba en un principio a las 17.00.
Los Rubin presentaban al mediodía el espacio Humberto Rubin Producciones, con una programación que incluía shows folclóricos, reportajes, misceláneas y series cómicas como Los tres chiflados. “Alquilé desde mediodía hasta las 17.00, teníamos entretenimiento, películas, Los tres chiflados, y organizábamos shows musicales”, recuerda Humberto.
Contenido. Por otro lado, Rubin señala que el aporte de la televisión es ofrecer las noticias del mundo a cada minuto. “Podés criticar o no, pero decir ‘sí, estoy enterado’, y ese es un aporte internacional magnífico. La noticia y la información son la base, pero de ahí a que estemos aportando algo culturalmente estamos muy lejos. El contenido sigue siendo deplorable”, resalta.
Comenta que los canales muchas veces tienen muy en cuenta los puntos de rating como si valieran “cien premios Nobel”, y se olvidan de producir buenos programas. “Yo por ejemplo veo generalmente noticias, que es lo que me importa, y en ese campo se está avanzando mucho porque hoy existe una tecnología que permite conocer al instante las noticias del mundo”, apunta Rubin, quien también es director de Radio Ñanduti.
Cambios. Por su parte, el realizador y audiovisualista Manuel Cuenca, refiere que en el contenido siempre primó el entretenimiento, “sin dejar de lado el aspecto periodístico”. “Hay canales que hoy tienen muy buenos noticieros, hay programas de debates muy interesantes, especialmente por los cambios políticos que tuvimos en estos años”, reflexiona.
Agrega que uno de los puntos fuertes de la televisión es su gran avance tecnológico. Asimismo, señala que es posible crear una combinación de las tres funciones de medios masivos como la tevé (educar, informar y entretener), pero se requiere “un esfuerzo de producción y creatividad”. “Se pueden hacer programas que tengan buen contenido y que no dejen de ser atractivos”, afirma Cuenca.
A su vez, el cineasta Ray Armele, dice que lo que no evolucionó fue un amplio sector del público, que muchas veces “se conforma con cualquier cosa”. “La televisión tiene un rol, es fundamentalmente comunicar, repito: si el público exigiera, tendría opciones, variedad en los canales, que en este momento son todos muy similares, no hay ficción, no hay muchos programas críticos, porque el público no los busca y no los exige”, apunta.
Anécdotas. Entre las historias detrás de cámaras, Humberto Rubin rememora una que lo involucró junto con sus hermanos, porque un día ya no podía pagar los derechos por difusión de Los tres chiflados. “A Alberto Herrera le preguntaron por qué no van Los Tres Chiflados, y él les comentó que iban a pasarlo en vivo, con Humberto, Arturo y Armando”, relata Rubin entre risas.
Por su parte, Manuel Cuenca comenta que antes se utilizaban bombillas como reflectores, y muchas estallaban en vivo. “El público tal vez escuchaba y nosotros teníamos que seguir con el programa como si nada hubiera pasado. Tampoco existía el aire acondicionado y nos empapábamos de sudor”, revela sonriendo el realizador.UH