Clase media se redujo en Paraguay y en la región debido a la pandemia

Un reciente informe del Banco Mundial sostiene que la clase media en nuestro país se redujo en un estimado de entre 1,5 y 3,2 puntos porcentuales en 2020. La crisis sanitaria motivó esta caída.

El Banco Mundial (BM) publicó ayer su informe denominado El lento ascenso y la súbita caída de la clase media en América Latina y el Caribe, a través del cual se evidencia un retroceso en lo que se refiere a este segmento en la región, incluyendo a Paraguay.

Conforme a las estimaciones sobre la clase media (ingreso per cápita de entre USD 13 y USD 70 al día), en nuestro país este sector pasó de representar un 43,8% de la población en el año 2019 a un estimado de entre 40,6% y 42,3% en el año 2020; es decir, se redujo en un aproximado de entre 1,5 y 3,2 puntos porcentuales.

La disminución en Paraguay es superior a la del promedio de la región (0,7 puntos porcentuales), pero cabe resaltar que es inferior a la contracción que tuvieron otros, como ser Argentina (caída de entre 3,3 y 8,5 puntos porcentuales) o Bolivia (5,6 puntos porcentuales).

El reporte del BM también hace énfasis en los efectos negativos que tuvo la pandemia por Covid-19 en el empleo y sostiene que en el caso de Paraguay se estima que durante el año pasado las industrias y los servicios fueron los que prescindieron de más trabajadores.

impacto. A nivel regional, los datos de la organización multinacional muestran que la crisis sanitaria empujó a 4,7 millones de personas de la clase media a la vulnerabilidad o la pobreza en América Latina y el Caribe en 2020, posiblemente revirtiendo décadas de avances sociales, según se estima.

“La región se encuentra en una encrucijada, el retroceso de conquistas sociales que tanto costaron corre el riesgo de volverse permanente a menos que se lleven a cabo reformas enérgicas”, dijo Carlos Felipe Jaramillo, vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe.

ESTANCAMIENTO. En las últimas dos décadas, según el BM, el número de personas que viven en la pobreza en la región se redujo a la mitad. La clase media superó a los vulnerables (ingreso de entre USD 5,50 y USD 13 al día) y pobres (por debajo de la línea de pobreza de USD 5,50 al día), para pasar a ser el grupo más grande en el año 2018.

No obstante, ese crecimiento se estancó en los últimos años y la región fue una de las más afectadas por la pandemia del coronavirus en términos de costos sanitarios y económicos, considerando que en el año 2020 la clase media se redujo a 37,3% de la población, desde un 38% anterior; y que los pobres representaron el 21,8% de la población regional.

A criterio del Banco Mundial, si bien las medidas paliativas, como ser los programas de protección social, ayudaron a contener el impacto negativo de la emergencia en el corto plazo, sin una recuperación acelerada e inclusiva y niveles similares de medidas de mitigación, la pobreza podría crecer nuevamente en el año 2021.

“Garantizar un acceso amplio a las vacunas, implantar sistemas eficientes y efectivos para distribuirlas y administrarlas y fortalecer los sistemas de salud en toda la región serán claves para la recuperación”, manifiesta el BM por medio de un comunicado.


Impacto también en desigualdad
El informe del Banco Mundial también asevera que la crisis por el Covid-19 amplificó los efectos nocivos de la desigualdad en la región, teniendo en cuenta que más de la mitad de los trabajadores de América Latina y el Caribe (54,4%) operan en el sector informal, nueve de cada diez trabajadores que viven en la pobreza se encuentran en el sector informal, y casi un tercio son empleados autónomos.
“Aquellos que estaban peor desde un principio probablemente sean los más afectados, y esto exacerbará la desigualdad en el ingreso en una región de por sí muy desigual”, señaló al respecto Ximena Del Carpio, gerente de la Práctica de Pobreza y Equidad del Banco Mundial. “El acceso a servicios básicos como electricidad, agua adecuada, saneamiento e incluso internet se ha vuelto aún más esencial bajo las medidas de confinamiento”, agregó.

Adicionalmente, el BM refiere en su reporte que los programas de protección social deben reevaluarse para ajustar su alcance e incorporar nuevos beneficiarios. “Las transferencias de ingreso son útiles para brindarles a los grupos vulnerables algún tipo de seguridad financiera durante los periodos de confinamiento, pero son temporales y podrían no ser suficientes para evitar una caída fuerte de la clase media”, manifiesta.