Entre vino y vino, una chica abusó de su amiga

Autora dijo que las relaciones fueron consentidas.Fue castigada con 7 años de cárcel.
Muy joven, Romina (nombre ficticio) salió de la casa de sus padres. Decidió trabajar, independizarse y estudiar una carrera. Alquiló una piecita en General Delgado (Itapúa) y se hizo muy amiga de la hija de la dueña de casa, Laura (nombre ficticio). Un día cualquiera del 2016 decidieron compartir unas copas de vino, hecho que marcó un antes y un después en la vida de ambas.

Entre copa y copa, las cosas fueron confundiéndose… a Romina se le fue la mano. Laura hizo notar su incomodidad y días después denunció a su amiga.

Pasaron dos años hasta que llegaron a tribunales y el pasado jueves se conoció el fallo: Romina fue condenada a siete años de prisión, por manosear a Laura.

La fiscala del caso, Zully Ibáñez, calificó el caso como sui generis (peculiar). Admitió que no esperaba el fallo y opinó que no esperaba una pena tan elevada.

Particularmente considero que 7 años es destruirle la vida por una locura tomando vino

“Me llamó poderosamente la atención porque la victimaria no tiene antecedentes. Estudia Derecho, trabaja, estaba saliendo adelante. Tenía libertad ambulatoria y después, con la declaración de la víctima, el Tribunal (de Sentencia) decreta su detención y su remisión al Cereso (cárcel de Itapúa)”, dijo Ibáñez, quien pidió dos años de cárcel por los atenuantes.

Durante el juicio, ambas chicas dieron su descargo. Romina asumió los hechos, pero alegó que las relaciones fueron consentidas por la víctima.

Sin embargo, fue el testimonio de Laura el que conmovió al jurado. “La víctima declaró muy bien, quedaron totalmente consternados por su declaración”, indicó Ibáñez. Además, el informe victimológico elaborado por el psicólogo forense la favoreció también, pues arrojó que había quedado muy afectada.

“Según el informe, la chica quedó muy traumada, se quedó sin habla, no quería que le inspeccione una ginecóloga ni una psiquiatra. Quería que sean varones los que le inspeccionen”, señaló Ibáñez.

¿Pa’i impune? Muchos internautas se quejaron sobre el fallo, en las redes sociales. La crítica colectiva fue debido a que el sacerdote Félix Miranda fue condenado a apenas 2 años de cárcel, por abusar de un menor.

5 años. En 2016, Sonia Felisa Cáceres fue condenada a 5 años de prisión por abusar de su alumna de 9 años en reiteradas ocasiones. La profe dijo que “solo fue un beso”.
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