Los expertos insisten en que las últimas resoluciones de las entidades reguladoras chinas serían clave para futuro del gigante financiero.
Ant Group, una de las empresas tecnológicas más grandes a nivel mundial, fundada por el multimillonario Jack Ma, recibió instrucciones del Banco Popular de China de controlar la expansión de sus servicios para evitar mayor riesgo financiero, dio a conocer el pasado domingo South China Morning Post.
Pan Gongsheng, vicegobernador de la entidad, manifestó que la compañía ignoró los requisitos regulatorios y presionó a sus pares utilizando su estatus de líder en el mercado. Enfatizó que “Ant necesita volver a sus raíces de pagos [electrónicos]”, además de señalar que tiene que rehusar a la competencia irregular, proteger la privacidad de los clientes a la hora de ofrecerles servicios financieros, así como rectificar cualquier irregularidad en sus negocios de seguros, administración de patrimonio y crédito.
Ant Group dijo el pasado domingo que establecerá un grupo de trabajo de “rectificación” para implementar los requisitos regulatorios en su plena forma, recoge Reuters.
Mientras, Bloomberg precisó que, aunque el Banco Popular de China no ordenó desintegrar la empresa, declaró que Ant Group tiene que comprender la necesidad de reformar su negocio y elaborar un plan de actividades correspondientes lo antes posible. Desde el punto de vista de Shujin Chen, experta en inversiones, citada por la agencia, el potencial del crecimiento de Ant Group se limitaría si la empresa vuelve a apostar únicamente por los servicios de pago. Zhang Xiaoxi, analista de Gavekal Dragonomics, sostuvo que el mensaje del Banco Popular de China “es la culminación de una serie de regulaciones y marca la dirección al negocio de Ant en el futuro”.
La serie de edictos de las autoridades chinas podría representar una amenaza para la expansión del imperio financiero de Jack Ma, que ha crecido a ritmo dinámico en los últimos años. Por ejemplo, en noviembre pasado el regulador chino suspendió la salida a bolsa de Ant Group, que, según cálculos, debería ser “la más grande de la historia”, y podría ayudar a la empresa a recaudar 34.500 millones de dólares. Al mismo tiempo, la autoridad antimonopolio de China inició una investigación contra Alibaba Group, el consorcio tecnológico de Jack Ma, por sospechas de monopolio.
