Régimen de Alfredo Stroessner. La cantante Lizza Bogado recuerda aquel calvario

La cantautora Lizza Bogado rememoró los duros momentos que le tocó soportar a su familia durante el stronismo, en medio de persecuciones y detenciones arbitrarias. Lamentó que haya paraguayos que aún reivindiquen un régimen que los oprimía y torturaba.

“Viví una infancia muy dura, porque vengo de una familia perseguida por la dictadura”, lamentó la artista Lizza Bogado al recordar el régimen de Alfredo Stroessner. “Cuando era niña, venía la Caperucita a cualquier hora de la tarde, nosotros jugando con mi hermano y de repente entraban… no sé qué es lo que buscaban pero le llevaban a mi papá preso”, relató.

Generalmente, tardaba muchos días en volver a casa y nunca contaba a sus hijos qué sufrió realmente estando retenido. “La injusticia es algo muy difícil de digerir, de tragar… (Mi papá) se quebraba a veces”, destacó.

Al igual que con su padre, su marido, Benjamín Fernández Bogado también fue perseguido por la dictadura, por ser periodista. “Prácticamente nos convertimos en leprosos, él primero y yo como su esposa”, aseguró.

La artista comentó que en una ocasión, Gustavo Stroessner (hijo del dictador) le alertó anticipadamente que su esposo contaba con una orden de captura por algunos artículos que publicó y que lo mejor sería que no regrese al país, porque en ese entonces estaba estudiando en Estados Unidos.

A raíz de eso, Benjamín solicitó una extensión de su beca y se quedó unos meses pero luego no tuvo otra opción más que regresar, ya que a Lizza le negaron la visa para ingresar a dicho país y estaba esperando su segunda hija.

Cuando el periodista llegó al aeropuerto Silvio Pettirossi lo sacaron de la fila y lo llevaron a una patrullera hasta la Dirección de Investigaciones. “No me dieron ninguna explicación. Casi me tiraron de la escalera estando embarazada”, lamentó.

Agregó que se pasó días yendo a dicha dependencia en busca de información que le era negada por los uniformados. Afortunadamente, fue liberado con vida, a diferencia de otros perseguidos políticos de la época. “El día que lo liberaron, había sido que hace rato lo liberaron y me dejaron esperando”, agregó.

EL QUIEBRE EN SU VIDA MUSICAL

La cantautora relata que al principio de su vida artística se dedicó a tocar canciones folclóricas o “ingenuas”, como ella misma las calificó. Sin embargo, en un momento dado, se produjo un quiebre en su carrera y empezó a seguir músicas que relataban las luchas sociales, como los temas de Mercedes Sosa.

Cuando empezó a cantar también ese tipo de canciones, con mensajes y contenido social, también comenzaron a llegar las amenazas. “Empiezo a recibir ‘sugerencias’ de que sería bueno que yo continúe nomás con el repertorio que venía haciendo”, comentó.

Fue en ese momento que decidió conversar con su familia y su padre le consultó qué es lo que realmente ella quería hacer en la vida, a lo cual Lizza respondió: “Esto es lo que quiero”, detalló. Ante ello, la respuesta de su padre fue: “Vos tenés que seguir siempre lo que te dicta tu corazón y tu consciencia”. De esa época data su primera composición que se llama Canto y Plegaria, que habla de la injusticia hacia el campesino.

“Yo sentía que a través de la música podía llevar un mensaje a la gente, que la gente se prendía y había una válvula de escape: lo que mal llamaban música de protesta. A mí me gusta decirle música testimonial o música que busca concienciar a la gente”, declaró para ABC TV en el programa Tu historia. Nuestra historia.

Además, contó que muchos de los artistas de la época fueron prácticamente secuestrados durante conciertos. “De repente, en plena actuación entraban y les llevaban (…) Era impresionante la multitud que se juntaba para escuchar a artistas; el pueblo través de estas canciones expresaba su descontento”, puntualizó. 

INFELICES Y CALLADOS

“Cuando yo escucho a la gente decir: ‘Eramos tan felices y no lo sabíamos’… También estábamos lo que eramos tan infelices y no podíamos decirlo porque si vos te animabas a decirlo, siempre estabas expuesto. Era una época donde había muchas intrigas, inclusive dentro de una familia, yo creo que de ahí viene que los paraguayos desconfiamos unos de los otros”, dijo la artista.

Recordó que durante esa época, muchas mujeres fueron violadas y presas. Al igual que ellas, muchos ciudadanos desaparecieron y nunca se supo su paradero, por lo cual hasta ahora se siguen buscando sus restos.

“Me causa indignación, y con una mezcla de tristeza, cuando la gente pide que vuelva la dictadura. Yo creo que realmente no saben el fondo, lo que significa vivir en una dictadura; quizás esa gente vivió muy confortable, dentro de su área de confort, a lo mejor se tragó muchas cosas que quería decir y no lo hizo, también hubo gente muy corajuda, valiente que luchó, que peleó”, aseveró.

En ese mismo sentido, destacó que mucha gente siente “nostalgia” de esa época porque durante todo el periodo democrático aún no se enseñó profundamente todo lo sucedido en la época de Stroessner.

DEMOCRACIA IMPERFECTA

“Tenemos que reconocer que tenemos una democracia imperfecta, una democracia cuyos cimientos justamente fueron los que vivieron y prodigaron la dictadura durante tantos años y por eso es que creo que el protagonista más importante y el héroe, guapo y valiente es el pueblo paraguayo”, manifestó en otro momento de la entrevista.

Además, destacó que gracias a que el pueblo salió a las calles la democracia se mantiene pese a que costó muchas vidas. “Democracia y gratitud al pueblo (…) Cuando la gente malinterpretó e interpretó la Constitución Nacional a su antojo, fue el Pueblo el que sostuvo la democracia”, concluyó. ABC