Stroessner hasta en la cédula

Stroessner hasta en la cédula

La capital del Alto Paraná cumple 62 años este domingo. Los allí nacidos entre 1957 y mediados de 1989 seguirán cargando con el estigma de llevar en sus documentos personales el apellido del dictador Stroessner.

Pasa eso con las cédulas de identidad policial, las partidas de nacimiento, los certificados de bautismo, las actas matrimoniales, pasaportes, etc.

Claro, lo que hoy conocemos como Ciudad del Este se denominaba anteriormente Puerto Presidente Stroessner, ciudad fronteriza con Foz de Yguazú (Brasil), que luego pasó a denominarse solamente Presidente Stroessner. Antes por decreto del 3 de febrero de 1957 (tres años después de la asunción de Stroessner al poder) había sido bautizado el lugar que aspiraba a consolidarse como ciudad con el nombre de “Puerto Flor de Lis”.

Más adelante, los fanáticos del dictador tiraron el nombre original al río Paraná y le dieron a la ciudad el apellido de su “único líder”, que se mantuvo hasta el 2 y 3 de febrero de 1989, día en que cayó derrocado por un golpe militar con apoyo de un sector importante de la sociedad.

Durante la dictadura, los opositores no querían pronunciar el apellido del general dictador y le llamaban “Ciudad Jardín”.

El problema estaba en el gentilicio. Nunca se intentó llamar a un habitante de esa ciudad utilizando el apellido del jefe militar. Tal vez se ensayaron adjetivos como “estronistas” o “estronianos” pero no quedaban bien.

Tras la caída de Stroessner se hizo un plebiscito para cambiar de nombre a la capital del Alto Paraná y los habitantes coincidieron en denominarle Ciudad del Este. Aunque tampoco ofrezca muchas alternativas para un gentilicio, suena mucho mejor.