Aguas de piscinas y arroyos podrían ocasionar otitis

Aguas de piscinas y arroyos podrían ocasionar otitis

Los niños deben ingresar a las aguas recreativas con los oídos protegidos. Foto: Ilustrativa.
Los niños deben ingresar a las aguas recreativas con los oídos protegidos. Foto: Ilustrativa.

La otitis es una inflamación del oído y puede ser externa que es la que se produce por el contacto de gérmenes presentes en aguas recreativas. Se recomienda utilizar protectores especiales para oídos y el secado cuidadoso sobre todo en niños. El uso de cotonetes y gotas óticas contribuyen a complicar la infección.

Dolor intenso, secreción o disminución de la audición son algunos de los síntomas con los que se manifiesta la otitis de verano que ocurre cuando se infecta la piel del canal externo del oído luego del ingreso de agua al canal auditivo.

Debido a la época en que los bañistas ingresan a aguas ya sea de cauces naturales como arroyos, lagos o ríos y en las piletas y piscinas es recomendable utilizar protectores para esta zona, afirma el doctor Alberto Lezcano Macchi, jefe de Residentes del Servicio de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello del Hospital de Clínicas.

Otro cuidado importantes es el secado minucioso tras salir de agua. “Al secar con toalla, esta no debe introducirse así como ningún otro objeto dentro del oído”, señala el profesional.

La otitis es una inflamación del oído que puede ser externa o media, causada por infecciones virales, bacterianas o bien traumáticas, que generan acumulación de fluidos en el tímpano, lo que produce dolor de oído, hinchazón, enrojecimiento y problemas de audición.

Existe una diferencia entre los tipos de otitis agudas (externa y media). En este caso, la otitis de verano se produce en el oído externo y como una de las causas principales, se debe a la presencia de gérmenes en las piletas, por ejemplo.

“En verano, la otitis externa u otitis del nadador es muy común. Este tipo de otitis ocurre cuando se infecta la piel del canal externo. En esta época, los baños en cauces naturales o piscinas son frecuentes y el ingreso de agua dentro del canal auditivo se hace más fácil, dejando la piel más húmeda y removiendo la capa de defensa, lo que facilita la infección”, expresó Lezcano Macchi.

No usar cotonetes ni alcohol boricado

Por lo general, cuando se presenta alguna situación de dolor o molestia en los oídos, se usan elementos como hispopos de algodón, cremas, alcohol boricado y hasta cualquier objeto puntiagudo.

“El uso de objetos con puntas, tapas de bolígrafo que se observa comúnmente o cotonetes para sacar el agua, empeora la situación, ya que la piel que ya está más sensible sufre un trauma y así la infección inicia”, advirtió el profesional.

En caso que quede una sensación de agua en el oído, el otorrino recomienda el uso de tres gotas de alcohol boricado, pero si no pasa, consultar rápidamente con el especialista. Además hace hincapié sobre el uso de cotonetes ya que puede producir perforación del tímpano u otras infecciones del oído externo así como cualquier otro objeto puntiagudo que pueda introducirse en el conducto auditivo.

La Cátedra y Servicio de Otorrinolaringología del Hospital de Clínicas realiza atenciones de lunes a viernes, en los horarios mañana y tarde y las citas pueden realizarse vía agendamiento telefónico, (021) 585 730 o (021) 585 521 o 0961 663545 de lunes a viernes de 7:00 a 17:00 horas.