Yerba elaborada por los guaraníes es reconocida a nivel mundial

La yerba mate “Origen Ka’aite”, procesada en forma ancestral por familias Ava Guaraní de Canindeyú, ha sido incluida en la lista mundial del proyecto Arca del Gusto, con sede en Italia. Es una certificación dada por la organización Slow Food, que promueve alimentos artesanales de excelencia.

Por Andrés Colmán Gutiérrez – @andrescolman
Una marca de yerba mate muy especial, que nació entre mateadas y canciones étnicas en una aldea indígena Ava Guaraní, en el departamento de Canindeyú, acaba de ingresar en una lista exclusiva de 1.340 productos artesanales de alta calidad, procedentes de 83 países, en el proyecto denominado Arca del Gusto, que promueve desde 1996 la organización Slow Food.
“Tenemos el agrado de compartir que el Paraguay ha posicionado uno de los primeros alimentos en el Arca del Gusto, de Slow Food, la yerba mate silvestre Ka’aite, cosechada y procesada por pueblos Ava Guaraní en la zona de Canindeyú, en donde abundaba antiguamente la selva y hoy es un remanente de selva nativa de esa zona”, informa la organización Slow Food Paraguay – Karu Mbegue.
Precisamente, el capítulo paraguayo de Slow Food es el que se ocupó de fiscalizar durante un año todo el proceso de recolección y elaboración de la yerba mate, para certificar que se ajuste plenamente a los requisitos de la organización, para que pueda figurar en la lista del Arca del Gusto.
La yerba Origen Ka’aite “es producida por los Ava Guaraní y la diferencia con otras yerbas en general es que es recolectada de la selva, según la forma ancestral en que se hizo siempre. No solo la cosecha es silvestre, sino la forma de secado. Está hecha según el conocimiento ancestral, no fue tocada por ninguna máquina, está hecha por las manos de los indígenas y con mucho cariño”, señala Slow Food Paraguay – Karu Mbegue.
El proyecto Arca del Gusto se creó en 1996, en Turín, Italia, con el propósito de tener un catálogo de productos alimentarios en peligro de desaparición, describirlos y captar la atención del público sobre estos productos de todo el mundo, estrechamente vinculados a comunidades y culturas locales específicas.
Según los criterios de Slow Food, los productos incluidos en el Arca tienen que: a) ser de una calidad gustativa excepcional; b) estar vinculados a un área geográfica específica; c) ser producidos de forma artesanal y a pequeña escala; d) ser producidos con métodos sostenibles y justos; e) estar en peligro de extinción
La yerba mate es elaborada artesanalmente por los Ava Guaraní de Yasy Kay, con su técnica ancestral, sin ninguna contaminación y manteniendo el sabor original.
Así empezó la yerba de los indígenas
El origen de la yerba mate actualmente reconocida a nivel mundial debe mucho a la promotora cultural, artista y cantautora compatriota Norma Ávila, integrante del grupo musical Pynandi, que realiza un estilo de música denominado “etno nativo folklore”.
En el 2006, buscando inspiración para sus composiciones, Norma se relacionó con una comunidad indígena Ava Guaraní de la zona de Yasy Kañy, departamento de Canindeyu, y durante una conversación con el Tamoi, el guía espiritual de la comunidad, este le reclamó por lo insípido de la yerba que ella usaba, y le convidó con la yerba silvestre que ellos cosechaban en el remanente de selva, que tenía un sabor puro y fuerte, totalmente distinto a las yerbas comerciales.
“Fue el inicio de un lindo proyecto, en que ellos me hicieron llegar una primera partida de 96 kilos, con los que empezamos a trabajar con un grupo de amigos. Creamos la marca ‘Origen Ka’aite – oro verde de la selva’ y empezamos una distribución mano a mano, totalmente artesanal, que fue creciendo y se fue extendiendo, sin pensar que un día llegaríamos a figurar en el Arca del Gusto, a nivel mundial”, recuerda Norma Ávila, entusiasmada.
El circuito de producción, aunque pequeño –entre unos 90 a 100 kilos por mes- se volvió una buena fuente de ingreso para la comunidad, con los criterios del llamado “comercio justo” y manteniendo los valores de producción orgánica y artesanal.
“Ellos producen la yerba con ese gusto ahumado que le da un sabor fuerte, aromático. Sacan las bolsas sobre motos, las envían por micro y yo las retiro en la terminal de ómnibus. En mi casa la empaquetamos y le damos el toque final, con cuidados detalles para que no tenga ninguna contaminación, no pierda su sabor original”, comenta Norma.
El producto es respaldado por varios locales y emprendimientos de comida sana, y es distribuido en los circuitos de empresas como Karu, El Granel, Lemonaid, entre otros. También se puede solicitar directamente al teléfono (0982) 211-014.
“Es una manera de preservar una tradición cultural y alimentaria genuina, de conectar a nuestros pueblos originarios con otras culturas, de crear y fortalecer sistemas de producción y comercialización con criterios justos, y de contribuir a una vida sana. Todo esto nos retroalimenta, nos da energías y nos permite rescatar nuestra identidad”, destaca Norma.UH
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