Presencia de turistas extranjeros es la única solución para la crisis económica

El ministro de Salud, Julio Mazzoleni, y su equipo entregó ayer al presidente de la República, Mario Abdo Benítez, un protocolo para la apertura gradual de la frontera entre Ciudad del Este (Paraguay) y Foz de Yguazú (Brasil). Al respecto, Said Taijen, de la Cámara de Comercio y Servicio de la capital del Alto Paraná, sostuvo que la única solución para la crisis económica es el ingreso de compristas brasileños. En el plan se establecerán horarios y cantidad de personas para el cruce para actividades comerciales, a través de un cordón sanitario en el microcentro esteño.


El protocolo incluye un cordón sanitario para el ingreso de turistas.

El Dr. Julio Mazzoleni refirió que el proyecto se respalda en una mejorada situación epidemiológica en Alto Paraná, debido al descenso de contagios y hospitalizados que se registra desde hace un par de semanas. En ese contexto, relató que el plan contempla la apertura de una zona específica de Ciudad del Este que estaría abierta para la entrada de personas por un periodo menor a 24 horas, a través de un cordón sanitario, que permitirá reactivar el comercio esteño.

“La fecha propiamente no está establecida, ya que tenemos aspectos secundarios que ir puliendo y además vamos a incorporar al CODENA para hacer las valoraciones”, detalló al ser consultado sobre la fecha en la que se pondría en marcha. Al respecto, afirmó que el protocolo está bastante avanzado y que solo se harían unos pequeños ajustes. En cuanto a los requisitos, comentó que se establecerá un régimen especial para las personas que viven en el lado brasilero y paraguayo. “También se proyecta un cordón sanitario en las inmediaciones de la capital departamental que se haría con los organismos de seguridad, se va a establecer claramente un perímetro de seguridad. Dentro de ese ámbito con las medidas estrictas de protocolo se hará un censo para todas las personas que trabajan dentro de ese perímetro”, comentó.

Por su parte, el empresario Said Taijen expresó que el interés principal del sector es tener nuevamente la presencia de compristas en el microcentro. “Nuestra solución es abrir las fronteras y que vuelvan los turistas para poder hacer nuestras operaciones normalmente”, refirió.

El gremio de empresarios habla de 500 millones de dólares de pérdidas mensuales como consecuencia del cierre del Puente de la Amistad, que data desde el 18 de marzo. Además, unas 75.000 personas que dependen del turismo de compras se quedaron sin empleo. La Clave