Japonés que recorre América en bici valoró la calidez de los paraguayos

Japonés que recorre América en bici valoró la calidez de los paraguayos
En Paraguay estuvo el mayor tiempo de su travesía porque fue contratado por la Asociación Japonesa del Este para dar clases del idioma nipón. Destacó el hielo que siempre le ponían donde solicitaba agua.
notas
Como un desafío a sus propios límites, Ryuta Utsumi, de 35 años, japonés, se propuso recorrer en bicicleta el continente americano, para tener un contacto más cercano con la gente y su realidad. La aventura se inició hace 1 año y 8 meses y actualmente está en la última etapa, que pretende terminar en Río de Janeiro, Brasil, tras recorrer 15 países.
Ryuta Utsumi estuvo 8 meses en el Paraguay, el país donde más tiempo se quedó, ya que fue contratado por los miembros de la Asociación Japonesa del Este para enseñar el idioma japonés en la escuela del Centro Cultural.
Con un limitado recurso de idioma, con un poco de español y otro poco del inglés, relata que se lanzó a la aventura de recorrer América para conocer de cerca a su gente.
“Mi mayor interés es conocer la costumbre y gente latina, por esa razón escogí la bicicleta. Porque si viajaba en colectivo y en avión solo iba a ir a destinos y lugares turísticos y no iba a ver la parte real”, reveló a través de un traductor, Eduardo Shimo, residente de Ciudad del Este, de la Asociación Japonesa del Este.
El aventurero es natural de Nagoya, departamento de Aichi, donde terminó sus estudios universitarios de hotelería y turismo, cuando en el noviembre del 2011 viajó a Canadá con intenciones de trabajar y luego desplazarse hacia el sur del continente americano.
En Toronto estuvo trabajando de limpiador de un restaurante y en un internado de estudiantes becarios, entre otras actividades que le sirvieron para ahorrar e iniciar su viaje en la bicicleta, que había adquirido en el mismo país. Desde ahí, con un mapa de América en su poder, inició la travesía en junio del 2015.
“La diferencia muy grande que se siente en Paraguay es que hay calor humano; en Japón somos más fríos y los latinos son muy amables. No hay esa distancia entre seres humanos como en Japón”, revela Ryuta Utsumi, a través de Shimo, quien hizo de traductor para la entrevista con Última Hora.
Lo que más le llamó la atención de los paraguayos fue el trato amable que recibió en todos los lugares donde llegó a pedir agua. “Le agregaban hielo y eso era la mayor felicidad para mí en el trayecto”, refirió.
Pero, como toda travesía, tuvo momentos de tensión, según reveló. En México, una caída en una pendiente lo dejó por un mes en reposo médico, ya que se golpeó el hombro.
“En Ecuador tenía que atravesar de una ciudad a otra y no me alimenté, porque creía que era cerca. Allí prácticamente me salvó la vida un señor por el camino, porque me regaló banana y otras frutas, cuando ya estaba por desmayar de hambre”, señaló.
Mientras que en Colombia creyó que un motociclista le quería asaltar, ya que le siguió a toda velocidad. “Cuanto más pedaleaba, más rápido venía hasta que desistí de correr de él. Allí me alcanzó y metió su mano en la cintura. Creí que me iba a hacer algo, pero sacó unos billetes y me pasó”, dijo.
En Paraguay ingresó por Encarnación, recorrió las Ruinas Jesuíticas y llegó a Ciudad del Este, donde conoció a la comunidad de inmigrantes japoneses y sus descendientes afincados en distintos puntos de esa región.
Luego de 8 meses, el japonés Ryuta Utsumi abandonó el país e ingresó al Brasil, donde pretende terminar su travesía en la ciudad de Río de Janeiro, de donde tomará vuelo a su país, después de 5 años de estar afuera.