La Policía inició desde anoche fuertes controles en el centro de la ciudad de Pedro Juan Caballero, como el los barrios periféricos. El objetivo es desalentar el accionar de las facciones criminales en la zona.
El operativo que se inició ayer se prolongará durante la jornada de hoy y luego se efectuará en forma sorpresiva en distintos puntos del departamento del Amambay. Para ello fueron puestos en apresto todos los agentes de los diferentes departamentos de la Policía Nacional que tienen su oficina regional en esta capital departamental como Narcóticos, Contra el Crimen Organizado, Interpol, Investigación de Hechos Punibles y Homicidios.
Las operaciones estarán a cargo del mismo director de Policía de Amambay, el comisario principal Ignacio Rodríguez Villalba y del jefe de Investigación de Hechos Punibles, comisario principal Nelson Alderete.
El objetivo de los retenes con importante cantidad de uniformados provistos con armas de grueso calibre, es el de sacar de circulación a personas con orden de captura; incautar armas, principalmente fusiles y metralletas, y evitar hechos punibles como robos, asaltos y homicidios, que se han vuelto hechos comunes en esta ciudad, tras el asesinato del capo Jorge Rafaat Toumani, en julio del 2016, señalaron las fuentes.
Tras la muerte de Rafaat las facciones criminales prácticamente convirtieron esta zona en campo de batalla y hasta se volvió normal ver a los miembros de las bandas deambular por la ciudad a bordo de potentes camionetas y armados con potentes fusiles de ataque. El principal objetivo de los grupos que operan en la zona es conseguir el control absoluto sobre esta región, por la que pasa la mayor cantidad de drogas, armas y municiones hacia las favelas de la principales ciudades del vecino país. Fuentes de inteligencia confirmaron que los controles iniciados ayer son el inicio de un operativo a corto plazo para desarmar a la población civil, e intentar detener a integrantes de bandas de narcotraficantes brasileños, quienes se han afincado en forma clandestina en territorio paraguayo, algunos con protección de autoridades locales, señalaron. ABC
