Hay una escasa presencia de los turistas compradores argentinos debido a la inestabilidad de la moneda en el vecino país.FOTO: TOMÁS BOGADO.
Locales comerciales cerrados y cientos de personas desempleadas son algunas de las consecuencias que genera el bajón en las ventas de entre el 60 y 80% que registra el sector comercial de Encarnación en los últimos meses. Esto obedece a la escasa presencia de los turistas compradores argentinos debido a la inestabilidad de la moneda en el vecino país. Si bien esta situación afecta a toda la ciudad, la crisis es más notoria en el circuito comercial, en el que el movimiento ayer era prácticamente nulo.
“Hace tiempo que estamos sintiendo este bajón comercial en el circuito y, por ende, en Encarnación porque yo siempre digo que si en el circuito están bien las cosas a Encarnación también le va bien porque a través del puente internacional entran los turistas de compra y también los que vienen a disfrutar de lo que es nuestra ciudad, dejando sus beneficios y hoy es el día que se está sintiendo eso. Muy pocos argentinos están viniendo”, explicó Arístides Martínez, antiguo comerciante del rubro de sastrería.
Agregó que a raíz de esta situación varios comercios se cerraron y hay mucha mano de obra sin empleo, y que esto obedece a la inestabilidad de la moneda argentina. “Desde el año pasado están teniendo una inestabilidad de su moneda, pero en este momento se está acentuando, tengo el registro, el año pasado a esta época del año el dólar argentino estaba 18, 18,50, 19 y hoy el dólar en la Argentina su cotización está 40, 41, llegó inclusive a 44. Eso está influyendo en todos los sentidos en el circuito, están viniendo muy pocos argentinos, y los que vienen preguntan, pero casi no compran porque con esta cotización no les conviene hacer sus compras acá, en algunos rubros seguro les conviene aún”, dijo.
La mayoría de los comercios abiertos son propietarios de locales, mientras que los que están cerrando son los inquilinos, considerando que el costo del alquiler de cada negocio oscila entre 1.000 y 3.000 dólares. Con el cierre quedan desocupadas muchas personas, mientras que los locales abiertos disminuyen la cantidad de funcionarios, y en la mayoría de los casos los empleados están trabajando por comisión sobre ventas, pero al no existir venta prácticamente no ganan nada, informó Martínez.
AUTORIDADES NO ATACAN A INFORMALES
Arístides Martínez manifestó que actualmente los verdaderos comerciantes son los que se están quedando a trabajar en Encarnación. “Cuando están bien las cosas vienen de todo el país, hasta inclusive vinieron argentinos y brasileños a instalarse a trabajar acá, algunos vinieron a trabajar formalmente y otros informalmente, la mayoría de manera informal, pero ahora desaparecieron toditos, y hoy nos quedamos los verdaderos comerciantes que mantenemos nuestra comuna, nuestro estado y en la hora de la verdad nuestras autoridades no nos ayudan.
Lo único que hacen es nos atacan con impuestos de todos los lados a nosotros los que estamos legalmente constituidos y estamos siempre, y cuando hay movimientos nos avanzan los ilegales y eso no se ataca, hacen la vista gorda, no les interesa”, enfatizó.
LA NACION
