El BM propone mejorar el gasto y utilizar mejor el dinero público

Dieron a conocer ayer el informe sobre la revisión del gasto público y la gestión en los sectores sociales de Paraguay, realizado por el Banco Mundial.

El Banco Mundial (BM) presentó ayer el informe sobre la revisión del gasto público y de la gestión en los sectores sociales de Paraguay, resal­tando debilidades y falencias existentes en lo que respecta a educación, salud y seguri­dad social.

En ese sentido, el banco pro­pone reformas sectoriales y prácticas relativas a la gestión pública, que podrían ser rea­lizadas mediante prácticas de gestión pública relevan­tes para los sectores sociales como, por ejemplo, mejorar las compras públicas y gestión de salarios públicos.

Entre los principales puntos resaltados, el BM menciona en su reporte el crecimiento económico y sus efectos positivos hacia el bienes­tar, haciendo alusión a una reducción de la pobreza total y extrema en torno a 25 y 8 puntos porcentuales durante el período comprendido entre el 2003 y el 2017. Sin embargo, el organismo internacional sostiene que la pobreza y la vulnerabilidad siguen siendo pronunciadas en los niños, las minorías étnicas y la pobla­ción rural.

“A pesar del crecimiento eco­nómico continuo, en los últi­mos tres años la reducción de la pobreza permaneció estable. La mayor parte de la pobreza moderada y extrema se concentra en áreas rura­les. Cerca de la mitad de los pobres extremos son niños menores de 14 años, mientras que menos del 5% son adultos mayores”, destaca el banco.

El informe fue realizado por el BM a pedido del Gobierno paraguayo con el objetivo de identificar reformas e inver­siones estratégicas que sirvan para traducir el nivel actual del gasto en mejores resul­tados.

EXPUESTAS
Indica, además, que las fami­lias pobres están particular­mente expuestas a los efectos negativos de la volatilidad de precios y de producción que caracterizan a la economía paraguaya. Este tipo de cho­ques puede forzar a las fami­lias a recortar el consumo y las inversiones en capital físico o humano como, por ejemplo, enviar a los niños a la escuela o hacer uso de esta­blecimientos de salud, dice el informe del BM.

La representante del Banco Mundial en Paraguay, Celia Ortega, señaló que al BM le sorprendió que el creci­miento sostenido del Para­guay en los últimos años no tuvo un efecto derrame redu­ciendo la pobreza. En ese contexto, comentó que lle­garon a la conclusión de que ese crecimiento no pudo ser aprovechado por la población debido a la poca formación, el poco acceso a educación y salud.

“Para tener el desarrollo que todos queremos, que incluya a todos y todos puedan ser beneficiados, se necesita invertir en capital humano”, indicó Ortega.

“LLAMAR LA ATENCIÓN”
El ministro de Hacienda, Benigno López, reconoció y coincidió con el informe del Banco Mundial, que expone las debilidades y falencias del Paraguay en el ámbito educativo, de salud y seguri­dad social. López mencionó que el informe del organismo inter­nacional ayudará para comprender la profundidad de la trans­formación en la que se debe embarcar la sociedad.

“Cuando los números de educación te dicen que el 10% de los que van al cole­gio aprende, sabiendo que lo mínimo que debe aprender es el 90%, es algo que te tiene que llamar la atención y motivar a una profunda reflexión”, expresó.

En ese sentido, sostuvo que si el Banco Mundial revela que de los 12 años de escuela y colegio que van los niños en Paraguay, solo se computan como si fuesen que aprendieron por 7 años, tam­bién debe llamar la atención.

“Si te dicen que la inversión en salud pública se triplicó en los últimos 10 años, pero también se triplicó el gasto de bolsillo, también te tiene que llamar la atención”, insis­tió el titular del fisco.

LA NACION