Denuncian explotación “ilegal” de un cerro

Denuncian explotación “ilegal” de un cerro

Por Alberto Núñez, corresponsal

Algunos pobladores del asentamiento Calle 3 de Noviembre del municipio de Capiibary, departamento de San Pedro, denuncian que potentes máquinas se encuentran a punto de derrumbar parte uno de los cerros del municipio. Piden intervención de la Seam.

Se habla de que los explotadores no cuentan con la licencia ambiental, por lo que requieren de la intervención de la Fiscalía del Ambiente y de la Secretaría del Ambiente (Seam).

Los lugareños manifestaron ante la prensa que hace unos meses comenzaron los trabajos de gran envergadura en el lugar, lo cual hace que el cerro sufra severas debilitaciones, teniendo en cuenta que se está extrayendo piedras brutas y trituradas que son transportados a distintos lugares; sin embargo, ni siquiera el camino repararon los responsables, a quienes no han individualizado aún, refieren.

Los trabajos son constantes y los tractores, una pala cargadora de color amarillo y camiones volquetes siempre acarrean piedras y trituradas extraídas del pie del cerro de la Calle 3 de Noviembre. “Esto va caer en cualquier momento porque se está carcomiendo los alrededores; las autoridades deben ver la forma de parar esto antes que desaparezca en forma completa”, refirió uno de los vecinos, quien pidió el anonimato por temor.

Según nuestra fuente, la explotación del mencionado cerro no cuenta con la licencia ambiental expedida por la Secretaría del Ambiente (Seam), por lo que la Fiscalía del Ambiente, a cargo del agente Alberto Torres, con asiento en Santa Rosa del Aguaray, debe intervenir para, de esa manera, parar la supuesta depredación del cerro o, en todo caso, verificar si cuenta con la habilitación correspondiente y quiénes son los que están explotando.

ARENERAS CLANDESTINAS

Igualmente, lugareños de la localidad de Ara Pyahu de este distrito (Capiibary) se quejaron debido al funcionamiento de areneras en forma clandestina y que podrían hacer desaparecer el arroyo Retama, por lo que también piden a las autoridades ambientales la intervención, debido a que aparentemente no cuentan con la licencia ambiental expedida por la Secretaría del Ambiente (Seam). Según las quejas, allí utilizan máquinas pesadas y sofisticados equipos.