Bebé paraguayo hallado en Cascavel fue de visita, dice su abuela

Los familiares del bebé Bruno Prieto, quien fue víctima en el Brasil de un supuesto hecho de abandono, se encuentran desesperados y claman por la ayuda del Gobierno para recuperar a la criatura y a Liz, una sobrinita de 10 años, que también estaría en la misma situación, porque también viajó con ellos.

La abuela de los menores, Angélica Ruiz Díaz, vive en una humilde vivienda de la compañía San Jorge, del distirto de Liberación, Departamento de San Pedro.

La mujer explicó que su hija Adriana, de 17 años, fue al Brasil con su hijito Bruno y Liz, una sobrina de 10 años, por invitación de la tía, María Concepción Ruiz Díaz, quien reside en Cascavel desde hace varios años. Angélica señaló que su hija y los pequeños fueron solo para una visita de diez días y que no entiende qué fue lo que pasó y quién es la culpable de lo que le ocurre a su hija Adriana, además de Brunito y Liz. Además, pide ayuda a las autoridades nacionales para poder recuperar a su hija y sus nietos.

En el mismo sentido, la madre de Liz, Ninfa Benítez, pidió alguna acción a las autoridades para recuperar a su hija, su sobrino y a su hermana. Ella dijo que la última vez que habló con Adriana fue el 21 de octubre, pero no le comentó nada de lo que estaba pasando y ahora ya nadie le atiende el teléfono.

EL CASO.

Una publicación de un medio brasileño indicaba que el pequeño Bruno fue encontrado abandonado el pasado en el barrio Cascavel Velho, de la ciudad de Cascavel, oeste del estado de Paraná, Brasil, presumiéndose que era víctima de trata de personas para una adopción internacional ilegal.

“Los menores estaban siendo traídos de Paraguay para adopción ilegal”, refirió el martes la delegada del Núcleo de Protección a la Niñez y la Adolescencia, Raisa de Vargas Scariot, según reprodujo la página cateve.com del Brasil.

“María Paraguaia”, como denominan a la tía María Concepción Ruiz Díaz –a quien fueron a visitar supuestamente–, declaró que era la mediadora entre los interesados en la adopción y los amiliares de los menores, declaró De Vargas Scariot.

Según esta información, el precio de la transacción sería de 700 reales, pero tendría otros costos adicionales, agrega la nota.

Aparentemente, la mamá de Bruno fue llevada a una casa de acogida por tratarse de una menor de edad, de acuerdo a otras publicaciones