EE.UU. ordena la salida de doce diplomáticos rusos ante la ONU, según Moscú

Rusia anunció este lunes que Estados Unidos ha declarado persona non grata a doce diplomáticos de su misión ante Naciones Unidas y que les ha dado hasta el 7 de marzo para que salgan del país.

Según el embajador ruso ante la ONU, Vasili Nebenzia, la notificación se recibió hoy mismo y supone una «noticia triste» y una muestra de que EE.UU. no está respetando los acuerdos con Naciones Unidas sobre su rol como Estado anfitrión de la organización, que tiene su sede central en Nueva York.

Preguntado durante una rueda de prensa, el portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Ned Price, se negó a hacer comentarios sobre el tema porque la noticia se conoció cuando ya había comenzado a hablar ante los periodistas y no tenía detalles.

«No tengo nada que ofrecer aquí. Obviamente, no he visto esos titulares», zanjó Price ante la insistencia de los periodistas.

Poco después, un representante de la misión estadounidense ante la ONU confirmó la decisión y defendió que ésta no incumple en absoluto las responsabilidades de EE.UU. como país anfitrión.

Según aseguró, esas doce personas estaban «participando en actividades que no están de acuerdo con sus responsabilidades y obligaciones como diplomáticos» y se les ha pedido dejar el país para que «no dañen la seguridad nacional» de Estados Unidos.

El embajador ruso estaba en medio de una conferencia de prensa cuando atendió una llamada telefónica en la que, según aseguró, se le informó de la recepción de la notificación estadounidense sobre la expulsión de los diplomáticos.

Nebenzia dijo que por ahora no tenía los detalles sobre quiénes son los afectados por la medida ni explicaciones sobre su motivo.

El embajador ruso, en todo caso, se mostró convencido de que su país responderá con una acción similar, como es habitual en este tipo de crisis diplomáticas.

Nebenzia atendió a los medios para analizar la presidencia rusa del Consejo de Seguridad durante el mes de febrero, que llega a su fin hoy, y que ha estado marcada por la invasión de Ucrania.

En respuesta a las preguntas de los periodistas, el diplomático volvió a culpar a las autoridades de Kiev por el conflicto e insistió en que en Ucrania no hay «una guerra», sino una «operación especial» rusa que busca la «desmilitarización» y «desnazificación» del país.

Cuestionado sobre por qué Moscú denuncia un supuesto nazismo en Ucrania cuando su presidente, Volodímir Zelenski, es de origen judío, Nebenzia defendió que la ascendencia del mandatario es irrelevante «porque los neonazis son quienes tienen el poder». Hoy