China establece sus planes de desarrollo económico y social para los próximos cinco años: ¿en qué consisten los objetivos?

El plan se centra en mejorar las condiciones económicas internas y el bienestar de las personas, así como impulsar la innovación tecnológica y la seguridad nacional en medio de las tensiones con EE.UU.

La Asamblea Popular Nacional de China, el máximo órgano legislativo del gigante asiático, aprobó este jueves el 14.º Plan Quinquenal (2021-2025), que establece los objetivos del desarrollo económico y social del país para los próximos cinco años y más. 

El plan pone gran énfasis en mejorar las condiciones económicas internas y el bienestar de las personas, así como en impulsar la innovación tecnológica y la seguridad nacional en medio de las disputas territoriales en el mar de la China Meridional y de las tensiones con EE.UU. sobre varias cuestiones. Otra prioridad es centrarse en las fuentes de energía limpia, un paso más para alcanzar el objetivo estratégico de reducir las emisiones de dióxido de carbono a cero para 2060 en la segunda economía más grande del mundo.

Los principales objetivos del 14.º Plan Quinquenal de China son

  • Mantener los principales indicadores económicos dentro de un rango apropiado
  • Conseguir más del 7 % de crecimiento anual en los gastos en investigación y desarrollo
  • Mantener la tasa de desempleo urbano dentro del 5,5 %
  • Elevar el número de residentes urbanos al 65 % de la población
  • Aumentar en un año la esperanza de vida de los ciudadanos chinos
  • Promover el desarrollo verde
  • Promover el desarrollo de alta calidad de la Iniciativa de la Franja y la Ruta
  • Marcar el comienzo de una nueva etapa en la construcción de una China pacífica

Economía 

Por primera vez en la historia de los planes quinquenales del país (que se remontan a 1953), el 14.º Plan Quinquenal, que contiene 192 capítulos y 74.000 caracteres chinos, no estableció un objetivo específico de crecimiento del producto interno bruto (PIB). 

Según el plan, Pekín mantendrá su tasa de crecimiento económico anual promedio durante los próximos cinco años dentro de un rango “razonable” y se establecerá un objetivo anual basado en las condiciones específicas de cada año. El objetivo de crecimiento del PIB de China para 2016-2020 era superar el 6,5 %. Para 2021 se estableció por encima del 6 %.

La tasa de crecimiento anual de la renta disponible per cápita durante los próximos cinco años estará “en línea con el crecimiento del PIB”. 

Seguridad alimentaria, energética y financiera

También por primera vez, el plan contiene una sección especial para la seguridad del desarrollo, con el objetivo de reforzar el sistema y las capacidades de seguridad nacional y establecer mecanismos para garantizar la seguridad alimentaria, energética y financiera.

En el documento figuran 20 indicadores principales que cubren una amplia gama de áreas, incluidos ocho objetivos obligatorios, de los cuales siete se centran en la protección ecológica y el apoyo a la seguridad, como los objetivos para la producción de alimentos y de energía. Estos últimos se incluyeron por primera vez en el plan quinquenal.

En seguridad alimentaria, por ejemplo, el plan dice que China se adherirá a la línea roja de 120 millones de hectáreas de tierra cultivable para garantizar la seguridad alimentaria.

Reuters

La innovación y el desarrollo tecnológico

El plan enumera siete áreas como proyectos nacionales: inteligencia artificial, información cuántica, circuitos integrados, ciencia del cerebro, tecnologías genéticas y biológicas, medicina clínica y salud, así como exploración del espacio exterior, subsuelo, mares profundos y regiones polares.

Para apoyar el desarrollo tecnológico, se prevé mantener una tasa de crecimiento anual de más del 7 % en los gastos en investigación y desarrollo. Mientras tanto, varios parques científicos en Pekín, Shanghái, Shenzhen y Hefei fueron designados como centros nacionales de ciencia y se convertirán en incubadoras de empresas tecnológicas.

Además, por primera vez en el plan se menciona el ‘blockchain’, la tecnología que permite la creación de un libro de contabilidad digital compartido y criptográficamente seguro. Previamente, el presidente chino, Xi Jinping, respaldó la tecnología diciendo que el ‘blockchain’ desempeñará “un papel importante en la próxima ronda de innovación tecnológica y transformación industrial”. Sus comentarios impulsaron el lanzamiento de un proyecto de infraestructura de ‘blockchain’ nacional, que sirve como una “Internet para ‘blockchain'”. Algunos gobiernos locales anunciaron que ya lo han aplicado a su labor administrativa.

El énfasis en el desarrollo científico y tecnológico llega en medio de las tensiones con EE.UU. y otras naciones occidentales por motivos que van desde disputas sobre Taiwán y el mar de la China Meridional hasta guerras comerciales y disputas en el ámbito de la ciencia. RT