PEDRO JUAN CABALLERO: El nuevo crimen que consternó a la población fronteriza por tratarse de un comerciante de conocida y limpia trayectoria, apunta a problemas de deuda debido a que la víctima también se dedicaba a prestar dinero, especialmente sumas muy elevadas, que en algunos casos eran cobradas a través de la adjudicación de prendas dejadas en garantía o la ejecución de hipotecas.
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El asesinato de Hiroyuki Sato, de nacionalidad japonesa, de 60 años de edad, más conocido como “Tamano”, denominación de su establecimiento comercial extraída de la ciudad de Tamano, prefectura de Okayama, Japón, de donde habría nacido antes de emigrar, siendo aún niño, con sus padres al Paraguay, se produjo alrededor de las 10:30 horas de este viernes 29, cuando la víctima salía de su domicilio ubicado sobre Rubio Ñú esquina Gral. Caballero del barrio Virgen de Caacupé.
Según un testigo presencial que se encontraba cortando el césped de la vereda de la casa de la víctima, su patrón se encontraba enfrente a la casa, cuando se le acercaron dos sujetos jóvenes a bordo de una motocicleta, sin caso protector, y el acompañante, arma de fuego en manos efectuó varios disparos a quemarropa contra el mismo, quien a raíz de las heridas, en la cabeza y el tórax, 6 en total, cayó al suelo falleciendo de forma instantánea mientras los sicarios se dieron a la fuga con rumbo desconocido.
En la escena del crimen las autoridades intervinientes encontraron al costado de la víctima un fajo de dinero y una factura de Ande, lo que hace presumir de que la misma se disponía para ir a realizar el pago correspondiente.
Por pedido expreso de sus familiares, el cuerpo de “Tamano” Sato fue derivado a una empresa funeraria en donde el médico Forense, Dr. Marcos Prieto inspeccionó el cuerpo y diagnosticó la causa de muerte.
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Problemas de deuda
Aunque no se dio a conocer cuál podría haber sido el móvil del crimen, del cual se vienen teniendo varias hipótesis, descartando por supuesto el tristemente célebre “ajuste de cuentas”, ya que se trata de un próspero empresario y comerciante honesto, todo apunta a alguna deuda que alguien de la “pesada” tenía con la víctima, y que decidió saldarla asesinando al acreedor.
Hasta el momento no existe un solo sospechoso de ser el autor moral del crimen, y a juzgar por otros casos similares ocurridos, es prácticamente seguro de que todo siga así, a menos que esta vez, las cámaras de circuito cerrado con que cuenta la vivienda de la víctima, hayan estado funcionando y así se pueda identificar a los autores materiales para detenerlos y a través de ellos poder llegar al o los autores morales.
Ahora solo resta esperar y ver si existe realmente interés en aclarar el crimen. Por su parte la embajada de Japón, ya remitió una nota a la Comandancia de la Policía Nacional y a otros estamentos gubernamentales, exigiendo se aclare el horrendo crimen.amambaydigital.com
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Asesinato de comerciante apunta a problemas de deuda
