Asesino de empresario es investigado como autor de otro asesinato en Capitán Bado

El presunto asesino del empresario Juan Bautista Zapattini Riquelme, ocurrido el 27 de febrero de este año en Minga Guazú, Feliciano González, 28 años, se abstuvo de declarar ayer en indagatoria en la unidad de la fiscal Carolina Rosa Gadea, quien investiga el caso. El mismo fue detenido en una zona rural del distrito de “Karapa’i”, departamento de Amambay, cuando intentó darse a la fuga al percatarse de la presencia de policías. Fue rodeado y capturado en cumplimiento al oficio 287 del 11 de marzo del corriente, firmado por actuario del juzgado penal de garantías nº 5, a cargo de la jueza Cinthia Garcete.

El oficial inspector Hernán Fernández, del departamento de Investigación Criminal de la Policía, con destino en esa localidad, dijo que González fue declarado rebelde en el marco de la causa que lo investiga como autor del homicidio de Zapattini; además, tendría otro antecedente por igual tipificación penal ocurrido en Amambay y usaba como guarida una zona boscosa de la agroganadera “Trabuco”. En consecuencia, anunció que una vez levantada la rebeldía en esta circunscripción, solicitarán su traslado al Amambay para seguir la investigación del otro caso que lo tendría como protagonista.

En el caso del empresario de Ciudad del Este, existen testimonios de trabajadores de su establecimiento que incrimina en el homicidio al ahora detenido. La médica forense Raquel Cáceres había detectado cuatro heridas de arma blanca en la humanidad del fallecido al momento del levantamiento del cadáver y dijo que Zapattini murió a causa de shock hipovolémico producido por herida blanca. El arma homicida había sido entregada en su oportunidad por la madre del procesado.

El sospechado había sido imputado en rebeldía el 13 de marzo de este año por la fiscal Gadea y desde esa fecha se encontraba con paradero desconocido. González había sido la última persona que acompañó al empresario que salía de su granja en el km 26 de Minga Guazú para dirigirse a su domicilio. El día del crimen, Zapattini habría observado al exempleado por algunos comportamientos tras la ingestión de bebidas alcohólicas, junto a otros trabajadores de la finca. Luego lo mató de cuatro puñaladas y finalmente fue detenido para responder ante la justicia. LA CLAVE