Mercado global se prepara para dólar con esteroides

La inminente suba de tipos de la Reserva Federal, prevista para el 13 de diciembre, haría que los billetes verdes vuelvan a casa. Moneda estadounidense si¬gue siendo el principal refugio ante la incertidumbre. En relación al guaraní, se viene observando una leve tendencia alcista, todavía manejable para el BCP.

A principios de octubre se ha dicho que ante la entonces mayor especu­lación por una posible alza de tasas de interés a car­go de la Reserva Federal (FED) estadounidense, el precio del metal precioso podría seguir sufriendo.

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Advertimos que si rom­pía el fuerte soporte de los US$ 1,250 la onza, el siguiente paso sería ir por los US$ 1,200. Sucedió el rompimiento y al cierre de este artículo cotiza ya en US$ 1,206.

Al mismo tiempo, expli­camos que esta presión se extendería al peso mexi­cano.

La conclusión a la que se había llegado es que si ganaba Trump -como fi­nalmente ocurrió-, dicha alza de tipos estaría ga­rantizada. Mantenemos el pronóstico. La misma presidenta del Comité de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) de la FED, Janet Yellen, ha dado pistas muy claras de que no va a decepcionar al mercado.

Esto significa que la divi­sa estadounidense se está apreciando no sólo frente a las de mercados emer­gentes, sino incluso con­tra las de las economías desarrolladas.

Es importante porque aún el dólar es percibi­do por el público como el ‘refugio seguro’ ante mo­mentos de incertidumbre y miedo globales, mismos que se han incrementado con la victoria de Donald Trump.

Si a esto se le suma el factor China, otro de los países que junto con Mé­xico está en la mira del presidente electo de Es­tados Unidos -y que tiene serios problemas internos por la súper burbuja cre­diticia que infló y ya ex­plotó-, la mesa queda más que puesta para que el dólar se pueda fortalecer con ‘esteroides’.

No es casual que el yuan chino en lo que va del año se haya devaluado casi 6%, y que los capitales sigan buscando la manera de escapar del país asiático, el mayor consumidor de oro del mundo. Por cierto, este es uno de los facto­res que dan fundamento sólido de largo plazo al precio del metal precioso, pues los inversores chinos buscan desesperados pro­tección contra la pérdida de valor de su divisa.

Por lo aquí expuesto, el contexto económico in­ternacional, la aparente fortaleza de la economía estadounidense y la elec­ción de Donald Trump, el alza de tipos de la FED llegará en la próxima reu­nión del FOMC que con­cluirá el 14 de diciembre.

Banco de México hizo bien en subir el jueves pasado su tasa objetivo en 50 puntos base (pb) a 5,25 por ciento, pero lo tendrá que volver a hacer cuando menos en la misma pro­porción en su anuncio de política monetaria del 15 de diciembre.

Estas alzas –que se ha creído conveniente- no sirven ni son para abara­tar el tipo de cambio del peso frente al dólar, como algunos erróneamente piensan. No es la labor del Banco Central ni tiene porqué sería. Su trabajo tiene que enfocarse nada más en las presiones in­flacionarias, que siguen en ascenso.

En suma, a pesar de las bajas temporales que se están presentando, la de­bilidad del oro y del peso mexicano continuará en favor del dólar. Hay un riesgo real de que el dólar se infle demasiado y al­cance niveles de burbuja. Ojalá esta percepción sea errónea, pues no sería una buena noticia para nadie. 5DIAS

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