Moody´s disminuyó la calificación de Uruguay

Moody´s disminuyó la calificación de Uruguay
02 AGO 2016
5dias
La agencia calificadora de riesgos Moody’s redujo la perspectiva del sistema bancario de Uruguay (Baa2 negativa) a negativa .
Moody’s da calificación negativa debido a condiciones económicas desafiantes.
La agencia calificadora de riesgos Moody’s redujo la perspectiva del sistema bancario de Uruguay (Baa2 negativa) a negativa desde estable dada la expectati­va de que los riesgos de crédito aumentarán mo­deradamente, ya que las condiciones económicas desafiantes tienen igual incidencia tanto para los consumidores como para las empresas del país, y que la rentabilidad caerá. Sin embargo, los niveles de capital y liquidez si­guen siendo más que ade­cuados, señala Moody’s en el reporte, según seña­la el periódico uruguayo El Observador.
MOROSIDAD
‘‘La debilitada economía impulsará las morosida­des de préstamos corpo­rativos, al mismo tiempo que el aumento de los ni­veles de desempleo tam­bién conducirá a mayores tasas de incumplimiento para los consumidores’’, dijo el analista de Moody’s Alexandre Albuquerque en un comunicado.
El ratio de préstamos en mora ascendió a 3,1% en mayo de 2016, des­de 2,1% en diciembre de 2015. Moody’s prevé que aumente a 3,6% en los próximos 18 meses. La inflación también se ha convertido en un desafío clave para los bancos. Si bien las familias con sala­rios ligados a la inflación actualmente se benefi­cian de la suba de precios, los trabajadores que no reciben ajustes de salarios automáticos tienen menos dinero para gastar. Debi­do a que los consumido­res priorizan los pagos de hipotecas y servicios, la mora de los préstamos de consumo aumentará.
En línea con una menor demanda de los consumi­dores, el crecimiento de los ingresos de compañías locales también podría debilitarse, lo que perjudi­caría el desempeño de los préstamos corporativos.
DESACELERACIÓN
ECONÓMICA
Junto con una creciente competencia, una desace­leración del crecimiento de los préstamos, impul­sada por una desacelera­ción de la economía, ejer­cerá una presión a la baja sobre la rentabilidad.
La capitalización también continuará deteriorándo­se, aunque se mantendrá relativamente fuerte fren­te a muchos pares regiona­les.
A pesar del alto nivel de dolarización del sistema bancario, no obstante, la exposición de los bancos a la depreciación del peso es limitada, dice la agencia.