Los padres, los jóvenes y los códigos dictados por las tecnologías

Navegar se ha convertido en un concepto nuevo. Ya la primera imagen que nos viene a la mente a los citadinos al oír la palabra “navegar” no es un bote meciéndose en aguas de ningún tipo… es una figura compleja que se vincula con diversos adminículos que nos acercan información de todo tipo y nos permiten comunicarnos con cualquier lugar.
COMENTARIO
Juntos por la Educación
Navegar se ha convertido en un concepto nuevo. Ya la primera imagen que nos viene a la mente a los citadinos al oír la palabra “navegar” no es un bote meciéndose en aguas de ningún tipo… es una figura compleja que se vincula con diversos adminículos que nos acercan información de todo tipo y nos permiten comunicarnos con cualquier lugar.
CÓDIGOS DE LA GENERACIÓN MULTIMEDIA
Los jóvenes navegan casi para cualquier cosa (lo hacen hasta para comunicarse con alguien que tal vez se encuentre sólo a unos pasos de distancia), navegan para buscar información de la más compleja hasta la más superficial, para escuchar música, ver películas, televisión, hacer tareas, jugar en red, generar contenidos o explorar nuevos sitios. Las vastas aguas de internet permiten que los jóvenes lleven una vida distinta. La vida de la “generación multimedia”. Así aprenden, comparan, leen, hablan, se relacionan y construyen sus saberes.
La vida de los jóvenes está dividida en tres pantallas: la televisión, el celular y la computadora. El medio más popular: la televisión, la que está en cada hogar; el celular, el que les permite sus actividades favoritas, la comunicación con amigos y la música; la computadora, la que les brinda la oportunidad de navegar; y aunque no todos tienen acceso a ella, cada día más jóvenes de nuestro país encuentran la oportunidad de aprender a utilizar la herramienta.
UN ESPACIO SÓLO DE JÓVENES
Resulta interesante en particular, la gran autonomía que proporciona Internet a los jóvenes en cuanto a la familia. Se ha convertido en un espacio propio y son ellos quienes pueden decidir si dejarán entrar o no a los adultos a su espacio. De acuerdo a la percepción de los jóvenes, en internet no existe ese ambiente restrictivo y represivo de los adultos. Con internet, los jóvenes se interrelacionan de un modo más libre, pueden ser auténticos y hablar de sí mismos. Esto nos da la pauta de que al contrario de lo que se piensa, las tecnologías no les aíslan ni los convierten en autistas con pantallas. Somos los adultos los que tenemos dificultad para comprender que las tecnologías han generado nuevas formas de sociabilidad entre los jóvenes. Somos nosotros, los de las generaciones anteriores quienes, al no comprender los nuevos códigos, los percibimos como negativos.
MÁS ESENCIA, MENOS APARIENCIA
Si lo miramos de otro modo, podemos llegar a comprender lo interesante de la comunicación por medio de tecnologías, en que la mediación electrónica les permite una “presencia con ausencia física”, en que el exterior no interesa, interesa el contenido del aporte, la opinión, la agudeza mental. Mágicamente, han encontrado un lugar donde encontrarse en esencia, no en apariencia. Internet es hoy fundamental en la vida de los jóvenes. Si impedimos que accedan a ella, serán chicos aislados por no participar en el circuito comunicacional de los demás. Quedarían fuera. De esta manera es que los padres y madres tienen un rol fundamental por cumplir, pues la navegación debe ser responsable. Para ello, hay pautas fundamentales a tener en cuenta:
COMPUTADORA A LA VISTA
Es primordial mantener la computadora en un lugar de la casa conde pueda estar a la vista. Esto limitará su tiempo de uso y evitará que se conecten a internet en la privacidad de su habitación, lo que disminuye la capacidad de los adultos para saber qué hacen cuando navegan.
INTERESARSE EN SUS TEMAS
La mejor manera de estar al tanto de lo que hacen los chicos cuando están en Internet es interesarse en sus temas y participar de sus búsquedas al menos durante un rato. Esto permitirá a los adultos entender cuáles son sus intereses y preferencias y qué uso le dan a la herramienta. Por el otro lado, dará a los jóvenes la pauta de que los adultos comprendemos su universo al menos superficialmente y no rechazamos sus códigos.
ELABORAR CONJUNTAMENTE PAUTAS DE USO
Entre los miembros de la familia deben establecerse reglas y un orden en todas las cosas, también con el uso de internet. Esto permite acordar el tiempo de uso por día, los contenidos a los que se accederá, los sitios que pueden visitar y las reglas para un chateo seguro.
ALERTAR SOBRE LOS RIESGOS
Es primordial que los padres o adultos responsables dejen claro que en ningún caso deben brindarse datos sobre ellos ni información de ningún tipo por Internet. Para suscribirse a sitios o páginas de su interés, lo más seguro es crear una dirección electrónica a la que tengan acceso tanto adultos como jóvenes o niños para recibir información.
CONVERSAR SOBRE EL CHATEO RESPONSABLE
El chat es el espacio más corriente de uso entre los adolescentes en la Web, tanto en redes sociales como en los servicios de mensajería. Resulta clave que tanto adultos como chicos sepan que los foros de discusión en los que participan son seguros y que conocen a aquellos con quienes chatean. También debe conversarse sobre los riesgos de comunicarse con desconocidos y que encontrarse personalmente con gente que sólo conocen por la Web está estrictamente prohibido.
DIÁLOGO, LA CLAVE
Una vez más queda claro que la clave es el diálogo. Adultos responsables hablando sobre los riesgos que puede provocar un uso excesivo o irresponsable de Internet, pero conversándolo desde el entendimiento de la herramienta y de internet como una forma de llevar la vida, no mejor, no peor, simplemente con códigos y conductas diferentes a otros tiempos. Esa es la mejor vía para asegurar que los chicos y jóvenes tengan una experiencia provechosa y tomen lo mejor de la herramienta. 5DIAS