El objetivo era la cocaína

La Policía asegura que el objetivo del grupo que atacó días atrás la base de operaciones de la Secretaría Nacional Antidrogas era el robo de unos 200 kg de cocaína depositados en la bóveda de la institución, en base al relato de un agente detenido.

El Departamento de Investigación de Delitos basa la hipótesis del robo de cocaína guardada como evidencia en la confesión que supuestamente hizo el agente especial Rodolfo Díaz Almada, de 23 años, capturado anoche ni bien tomó su turno de guardia en la Senad.
Según el testimonio, el mismo proveyó de su pistola reglamentaria al cabecilla del grupo que asaltó la institución, a quien identificó como Emanuel Zacarías Rodríguez, actualmente recluido en la cárcel de Tacumbú junto a su presunto cómplice, Ángel Antonio Mongelós Meza. El antidrogas denunció de forma paralela en la comisaría de Mayor Otaño, departamento de Itapúa, el supuesto extravío de su pistola. Este habría sido solo un intento de desviar la atención sobre su supuesta implicancia en el hecho.
La Senad había insistido en que la intención de robo -que fue repelida a balazos por dos agentes de guardia- fue un intento desesperado por el robo de cocaína por parte de delincuentes comunes y no un intento de rescate al narco brasileño Ezequiel de Souza, recluido desde 2012 tras ser detenido en La Paloma, departamento de Canindeyú, con una carga récord de cocaína de 1.748 kilos.
Entre el viernes 18 y el sábado 19 de diciembre se produjeron dos intentos de robo en el cuartel de la Senad; en ambos casos, el objetivo fue desarticulado por el personal de guardia, pero desnudó la precariedad del sistema de seguridad en la dependencia antidrogas.
ABC